Declaración de la Plataforma del Tercer Sector con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres
La violencia contra las mujeres es una vulneración de los Derechos Humanos, de las más extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual. Atenta contra los principios de la igualdad de derechos y del respeto de la dignidad humana. La violencia contra las mujeres sigue siendo un obstáculo para alcanzar la erradicación de la pobreza, el bienestar, la paz, y la igualdad. Nos aleja de la consecución de la Agenda 2030 y los ODS.
La crisis sanitaria provocada por la COVID-19 está aumentando las desigualdades de género que ya existían en nuestras sociedades. Los efectos de la pandemia no son neutros al género, por lo que la respuesta debe tenerlo en cuenta.
Desde 2003, año en el que se iniciaron las estadísticas, más de 1.100 mujeres han sido asesinadas en España. En lo que llevamos del 2021, se han contabilizado 37 asesinatos de mujeres, dejando huérfanos y huérfanas a 24 menores. De acuerdo con los resultados de la última Macroencuesta sobre Violencia contra la Mujer (2019), más de la mitad de las mujeres (57,3%) residentes en España de 16 o más años han sufrido violencia a lo largo de sus vidas por ser mujeres.
Por todo ello, en el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, desde la Plataforma del Tercer Sector:
Pedimos que se erradiquen de una vez todas las formas de violencia machista.
No vamos a permitir ningún retroceso en materia de igualdad, ni un paso atrás.
No podemos permitir los discursos negacionistas contra la violencia machista. Apoyar cualquiera de estos postulados hace que la sociedad se convierta en cómplice y las victimas se sientas más desprotegidas. Negar esta realidad supone una amenaza para avanzar en igualdad y pone en peligro real a miles de mujeres.
Hacemos un llamamiento a todas las instituciones y a la sociedad en su conjunto con el objetivo de luchar sin concesiones y con contundencia contra la lacra de la violencia de género.
Solicitamos a las instituciones que se desarrollen todas y cada una de las medidas necesarias para luchar contra la violencia contra las mujeres.
Creemos necesario educar en valores y en igualdad real contra la violencia machista, para acabar con la desigualad estructural que acaba matando a las mujeres y para que las futuras generaciones crezcan en el respeto e igualdad entre hombres y mujeres. Es preciso poner el foco en el preocupante incremento de la violencia machista que se está produciendo en los últimos años entre las generaciones jóvenes y la que se ejerce a través de espacios como las redes sociales.
Entendemos que las mujeres no son un grupo homogéneo y que factores como la clase, la etnia, el lugar de procedencia, la orientación sexual o las discapacidades con las que puedan convivir influyen en las situaciones de violencia que se ejercen contra ellas. El análisis interseccional nos ayuda a comprender cómo operan las injusticias y la desigualdad social desde una base multidimensional.
Reclamamos que el diseño de las políticas de lucha contra la violencia de género tenga en cuenta el conocimiento y la experiencia del Tercer Sector en la atención directa a las víctimas de violencia machista. Queremos resaltar el papel que la acción voluntaria como ejercicio de implicación y participación ciudadana en la lucha contra esta lacra.
Trabajamos para que las entidades y organizaciones del Tercer Sector incorporen el enfoque de género y observen especialmente la violencia que muchas veces afecta a las mujeres en situaciones de pobreza y exclusión social.