El Tercer Sector de la C.Valenciana pide ser considerado agente social esencial en la reconstrucción de Valencia tras la COVID-19
La Plataforma del Tercer Sector de la Comunitat Valenciana (PTSCV), que representa a las entidades de acción social en nuestro ámbito territorial, ha reivindicado ante la comisión de reconstrucción del Ajuntament de València que se mantenga la declaración como esenciales de los servicios prestados por las entidades sociales en el período post COVID-19.
Asimismo, ha considerado indispensable el diálogo entre autoridades del ámbito local, Tercer Sector de Acción Social y resto de agentes sociales, especialmente en lo que se refiere al diseño y aplicación de las medidas de contingencia y reconstrucción necesarias en la crisis social provocada por el Coronavirus, que afecta de forma más virulenta a personas que antes de la pandemia ya se encontraban en situación de mayor vulnerabilidad. Y en este sentido, el tercer sector se ha reivindicado como agente social insustituible y asistente de los poderes públicos para la disminución de los efectos negativos de la pandemia y la recuperación de las personas en situación de mayor vulnerabilidad afectadas.
El presidente de la PTSCV, Luis Vañó, ha destacado además en su intervención ante la comisión de reconstrucción: ‘El Tercer Sector es un yacimiento de ocupación de calidad, feminizado, sostenible, con valor añadido, no deslocalizable y fundamental en la economía de la Comunitat Valenciana y de la ciudad de València’.
En su discurso, Vañó ha alertado del impacto de la COVID-19 en el trabajo de las entidades: ‘Nuestro trabajo es fundamental para garantizar la protección de los derechos de las personas en situación de vulnerabilidad y pobreza y para atender las necesidades básicas que las entidades prestan, pero necesitamos medios para poder seguir haciéndolo con la máxima seguridad posible y proteger tanto al personal laboral como al voluntario, así como a las personas atendidas. Sin embargo, el shock producido por esta crisis ha paralizado, cambiado o redirigido el funcionamiento de muchos de los servicios concertados y/o subvencionados. Las consecuencias, en términos de justificaciones, dificultades de financiación y de administración están siendo importantes y pueden llevar a la reducción de la actividad en el medio plazo, e incluso la desaparición de determinados servicios u organizaciones, con el consiguiente impacto en el empleo.’
La PTSCV ha demandado que se consensuen y articulen planes de actuación a medio y largo plazo que permitan la reconstrucción social desde una perspectiva centrada en las necesidades de las personas, especialmente de las que se encuentran en situación de mayor precariedad, y contando con el Tercer Sector como agente social esencial.
Impactos específicos de la COVID-19
Las redes y entidades que conforman la PTSCV indican que esos planes de actuación deben tener muy en cuenta algunos impactos sociales específicos que ha generado la COVID-19 como el impacto de género con la sobrecarga por parte de las mujeres del trabajo sanitario, de servicios esenciales y/o de cuidados; o el impacto en la infancia en pobreza cuyas dificultades han incrementado a consecuencia de la mayor desigualdad social que ha generado el Coronavirus; el de las personas con empleo precario y trabajadoras en situación de pobreza; el de las personas sin hogar, uno de los colectivos en situación de mayor vulnerabilidad a la hora de protegerse de la enfermedad; las personas mayores que han sido las más afectadas o las personas con discapacidad que han tenido que afrontar barreras de accesibilidad a la información preventiva.
Medidas de protección para personas en situación de mayor vulnerabilidad ante la COVID-19
La Plataforma del Tercer Sector de la Comunitat Valenciana ha indicado la hoja de ruta para proteger a las personas y/o colectivos en situación de mayor vulnerabilidad en la ciudad de València que pasa, en primer lugar, por la eliminación del sinhogarismo que antes de la pandemia afectaba a 800 personas en la ciudad, y destaca el Ingreso Mínimo y/o Renta Valenciana de Inclusión, así como el acceso a una vivienda social como las dos herramientas necesarias para su erradicación.
En segundo lugar, la PTSCV pide un Plan Municipal de Acceso a la Vivienda, con la contrapartida ventajosa de que las reformas y rehabilitación de edificios puedan convertirse en un motor para el empleo social y financiarse con fondos europeos. Un plan donde se incluya, además, como ayudas el pago del alquiler y de la hipoteca de las personas y familias que subalquilan viviendas.
La protección de las personas con discapacidad para que se garantice la accesibilidad universal en las informaciones, recursos tecnológicos municipales, aplicaciones móviles, teléfonos, procesos formativos y teleformación municipal accesible; así como la promoción de la inclusión social de la población gitana valenciana, particularmente en la infancia, son otras de las medidas que se plantean desde la PTSCV.
Combatir la difusión de estereotipos que promuevan la discriminación, la xenofobia, la aporofobia, la disfobia y los delitos de odio; mejorar el apoyo y la coordinación con las entidades del Tercer Sector de Acción Social; eliminar la brecha y el analfabetismo digital para favorecer la inclusión social de las personas que más lo necesitan y crear un Fondo Extraordinario de Ayuda para afrontar las situaciones derivadas de la pandemia son otras de las medidas imprescindibles en la hoja de ruta que plantea la PTSCV.